Por supuesto esta opinión es personal, seguro que hay muchísimas personas a las que le ha gustado, pero a mi me ha parecido flojito, flojito.
Jean Luc recibe un día en su buzón una carata de amor, en la que una mujer que se identifica como La Principessa le confiesa su amor y le da muy poquitas pistas sobre su identidad con la esperanza de que nuestro protagonista sienta curiosidad y le responda a la dirección de email que ella le indica al final de su misiva. A partir de aquí, Jean Luc se vuelve loco intentando desvelar la identidad de su admiradora, todas las nujeres de su entorno son candidatas y las va descartando una a una. Los enamorados inician una cadena de emails entre ambos en los que se demuestran sus sentimientos e intenciones.
Para empezar, el argumento es más propio de una novela juvenil, no tiene interés ninguno. Me ha costado no dejarlo a la mitad, lo reconozco, sólo lo terminé porque era muy cortito y, bueno, no me gusta dejar los libros a la mitad, nunca se sabe cuándo se va a poner interesante, y con esta esperanza lo terminé, pero fue en vano.
Jean Luc es nuestro personaje principal, un mujeriego que tiene una vida muy plácida como galerista de arte hasta que aparece esta mujer misteriosa que le quita el sueño. Aunque en la novela no se profundiza mucho en el personaje, a mí me ha caído bien, la reacción desmedida ante las cartas de amor me ha hecho gracia, enamorar a un hombre por correspondencia tiene que ser bastante difícil. Hubiese sido más fácil para el autor escribirla desde el punto de vista de una mujer, y ahí creo que ha estado el único interés del libro, ver cómo un hombre se enamora y pierde el sueño por una desconocida sólo por leer unas cartas ardientes y rebosantes de amor.
El resto de personajes son sólo de relleno; ellas para ser sospechosas de ser la misteriosa principessa y ellos para ayudar a nuestro enamoradizo protagonista a desvelar el misterio.
Las cartas son lo más interesante, de hecho, las páginas entre email y email se me hacían eternos y he ido buscando impaciente la letra cursiva que indicara que se tartaba de una nueva carta.
El final también bastante insulso, no es difícil adivinar quién es la dama misteriosa y la forma de desvelarlo también deja mucho que desear.
Lo mejor: las cartas.
Lo peor: Es aburrido, el argumento es simplón y los personajes no están bien definidos.
Vuelvo a decir que esto es sólo una opinión personal, no pretendo herir los sentimientos de nadie ni faltar al respeto al autor de la obra.
Vamos a puntuar. A esta novela le voy a poner un 5
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